domingo, 20 de julio de 2008

Hoy este blog es confesionario de íntimos secretos

Yo hoy
Hoy me he dado otro tiempo para alimentar mi egocentrismo, como si no estuviera ya a punto de estallar, como mi Gordo Capitalista.
Siento vértigo mientras subida en mi hamaca –que instalé en la sala de mi casa para rendir largos tributos a la naturaleza pendular del amor- me saco autofotos y pienso en ti. Sé que tu mirada veloz se ha paseado una y otra vez por aquí. Me pregunto muchas cosas acerca de esa mirada: ¿Cómo es que ha podido ser tan futurista? ¿cómo ha podido adelantar tantos años a su tiempo? ¿porqué me siento tan anciana, tan decrépita, tan a punto de tocar la tumba frente a ella? ¿porqué al posarse sobre mi cara marchita, debe adentrarse al pasado, para buscar los ojos insospechadamente ausentes de mi madre, a la que no conoce si no en una lejana fotografía? ¿porqué deseo hoy alejarme de ella, volver a mi pasado de nínfula ideal?

1 comentario:

Gonzalo Lizardo dijo...

Qué buena foto: esa mirada parece atravesar la cámara y la mirada del espectador, como si miraras muy muy muy lejos.
En efecto, me regreso a Zacatecas. O sea que, a partir de ahora, tendrás un amigo más en aquella ciudad.

Un abrazo... y nos seguimos leyendo.

PD: ¿Qué debo hacer para conseguir "Cultura Urbana" en Zacatecas?
PPD: Ya tengo tu novela. Pronto la leeré, en cuanto me instale allá.