miércoles, 18 de febrero de 2009

Light

Estoy cansada de cargar este bocado.
Por lo tanto aquí se los dejo, amigos,
cómanselo, disfrútenlo…

Este atracón de mi propia carne
me ha dejado casi bajo tierra.

Me dedicaré
a volar sobre las flores
como un colibrí,
y lo mejor:
dejaré de hacer libros,
seré libre...

sábado, 14 de febrero de 2009

El top ten a seguir en 2009

EL UNIVERSAL consultó a 18 escritores acerca de los 10 novelistas que hay que seguir este 2009.
http://www.eluniversal.com.mx/notas/576638.html

viernes, 6 de febrero de 2009

No me mal interpretes

Si crees que intenté lanzarte mis zarpazos a ti, te equivocas.
Mejor piensa que he sentido lo mismo que tú, igual de fuerte, que has sido mi copia, que somos dos idénticas gotas de llovizna cayendo en veranos diferentes. No escribo largamente para enviarte mensajes velados; escribo porque la mitad de mi cuerpo está helada, cubierta de nieve sucia. Escribo para calentarme los dedos, porque los tengo entumidos.

Comentarios de bloguer a bloguer (Dic 2008)

Canalla dijo...
Mis ojos diera
por saber siquiera
que soy tu hombre frío.
Serías mi desafío
y te querría rabiosamente.
Y eso sí lo sé
de buena fuente.
Mi único temor
es ser el tipo desabrido
del corridoy si así fuera,
más valiera
a este anuncio improvisado ser borrado, suprimido, condenado.


Rowena Bali dijo...
Frío eres, sí,
gélida la superficie
en la que escribes,
fríos los abrazos
que de mi recibes,
cubos de hielo los besos,
iceberg el ciber espacio
que de ti me separa.
Y si frío eres tanto
como desconocido,
nunca tu sabor sabré,
lejano desabrido.
Razón de más
para dedicarte un corrido.

Visita: http://paisdecanallas.blogspot.com/

miércoles, 4 de febrero de 2009

Dolores intensos

El alma se me hizo pedazos. Apenas en unas cuantas páginas había caído en tantos y tantos errores, en tantas y tantas pendejadas -incluyendo las de mis antecesores- que simplemente no pude más. Mi alma se tuvo que rearmar en una larga depresión durante la cual el culo se me puso demasiado gordo y el corazón me pendía de un hilo. Sufría unas punzadas terribles repentinamente, tan fuertes que me arrojaban al piso donde permanecía durante algunos minutos, esperando a que la muerte sobreviniera a un dolor que sólo traía más dolor. A veces me levantaba con la ayuda de alguien, a veces sola, pero para mi desgracia siempre me levantaba, nunca acababa de estallarme el corazón.
Su ausencia me inmovilizaba por grandes periodos, la había envidiado con tanta fuerza que terminé por necesitarla más que a mi misma. Se fue y mi cuerpo perdió toda su energía, era como si su recuerdo me vampirizara desde lejos dándome fuertes jalones en el músculo cardiaco.
El día que la encontré ya tenía yo el corazón hecho añicos y el alma juvenil desarmada y reconstruida en una tenebrosa cañada.
Cuando la volví a ver me pareció aun más hermosa que en los viejos tiempos, se había puesto más alta y más andrógina, más musculosa. El espíritu festivo y promiscuo no se le había quitado, pero su malicia había mejorado en forma conspicua y me hizo notar de inmediato que nunca se puede estar demasiado peor en esta vida y que el haberla encontrado después de tanto sufrimiento no era un alivio si no una nueva pesadilla.
Fragmento de un capítulo de Amazon Party, publicado en 2007