domingo, 4 de octubre de 2009

No quedó ni una

No quedó ni una,
ni bonita,
ni fea,
na y na,
nanay,
ninguna.
Ni una
mujer quedó
en esa ciudad,
ni felicidad,
ni caderas,
se las comió
la verdad.
Ni una nena
queda
en esa ciudad
donde se apostó
severa
la masculinidad.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Qué tristeza,peroque alegría leerte, besos row.