miércoles, 22 de junio de 2011

Cigoto devoto y conservador

No crean que por ser un simple cigoto no entiendo de asuntos sexuales, ni crean que no comprendo las acciones criminales que detonan la muerte de millones de los míos. Sé que entre ustedes bromean sobre nuestra existencia, les parece chistoso dejarnos morir de frustración entre esas ridículas bolsas de látex que se inventaron para no contagiarse de todas las porquerías que nunca podrán dejar de hacer. Nunca entenderán la importancia que esta carrera desesperada tiene para nosotros, negarnos la posibilidad de ser un solo triunfador o con suerte muchos triunfadores es un acto despiadado y perverso, que algún día han de pagar. Sí. Seguro van a decir que soy un conservador, un mocho. ¡Y lo soy! Lo soy desde diversas perspectivas. Soy un Cigoto devoto a la ley de Dios. Fui diseñado por una tecnología que ustedes pretenden vencer con sus bolsas de látex. No tienen una idea de lo fuertes que algunos de nosotros nos volvimos gracias a sus artimañas para matarnos: sus horribles espermaticidas, sus dispositivos intrauterinos, y todas las sucias patrañas para asesinarnos sin piedad justo para colocarle una macabra cereza al pastel de su cochinada. Mi padre es un hombre bueno, que se unió a una santa mujer. Ellos se amaron y no pusieron trampa alguna a este Cigoto, que ahora está hablando con ustedes.